Después de la muerte de mi madre y, después de sus muchos años vividos en la Residencia Queen Victoria, creo llegado el momento de dar las gracias a todas las personas que por allí han pasado, a lo largo de tantos años, sin dejar a ninguna. Los motivos son muchos, pero quisiera destacar: Todos los años que vivió contenta, y fueron muchísimos. El cariño que recibió de las personas que trabajaron y trabajan allí, durante todos esos años. El llegar a creerse una líder del Queen, porque se tuvieran en cuenta sus ideas y comentarios y se solicitaran sus opiniones por los distintos responsables y el personal. Y, en definitiva, por ser reconocida, siendo una persona sencilla, y hacerla feliz. Yo, personalmente, viví lo que he escrito, y como no me gustaría dejar a nadie al que deba dar las gracias, todas las personas son TODAS LAS PERSONAS, del primero al último, sin dejar fuera a personas del servicio del bar, peluquería, podólogos, etc. !!MUCHÍSIMAS GRACIAS!!
Altísima profesionalidad y trato. Clinica en continua renovación acorde a la tecnología actual.