Opiniones Centro educativo agora portals

Con dos hijos cursando estudios en el colegio Agora Portals desde los 3 años (ahora tienen 15 y 17) y pese a que uno de ellos este año va a terminar sus estudios preuniversitarios con ellos, por desgracia tengo que valorar muy negativamente este centro educativo, perteneciente al grupo Globeducate. Nuestra experiencia y opinión (compartida por muchos padres de alumnos) es que es un centro que invierte muchísimo en marketing publicitario e instalaciones, pero muy poco en personal docente y equipo psicopedagógico, pese a lo que anuncian en su web. Los profesores cambian continuamente, porque se van en cuanto pueden, y cuando un alumno tiene algún problema serio y específico, como nos pasó a nosotros con uno de nuestros hijos, se pone de manifiesto las carencias tanto pedagógicas como de apoyo psicológico y humano. El modus operandi del centro (les ha ocurrido a muchas familias) es chantajear al alumno que, por decirlo así, saben que les va a dar más trabajo y esfuerzo de lo que simplemente son capaces de dar, y ofrecen a su familia no repetir a cambio de irse a otro centro. El grupo Globeducate, al que pertenece el centro, nos demostró que apoyaba completamente esta forma de actuación, y que no es más que un negocio sin ápice de humanidad. Lo peor de este colegio, por lo tanto, no es que el precio sea completamente desproporcionado respecto a sus prestaciones, sino la falta de humanidad y capacidad educativa, sobre todo en los momentos en los que debería demostrar el gran centro escolar que pretende y anuncia ser.
Y como no podía ser de otra manera, la respuesta por parte del colegio a nuestra crítica han sido palabras llenas de hipocresía, vacías de contenido, y destinadas al puro marketing. Tanta falsedad y amabilidad de cara a la galería sencillamente nos repugna. Estamos seguros de que celebraremos la graduación en secundaria de nuestro hijo, y eso será no gracias, sino PESE al grupo Globeducate, y lo haremos en un nuevo centro educativo privado que ya desde las primeras semanas, y pese a costar literalmente la mitad que Agora Portals, nos ha demostrado ser mil veces más humano y resolutivo, aportando soluciones y opciones reales desde el primer momento. Con ellos sólo sufrimos fallos y errores, que empeoraron la situación, así como una carencia escandalosa de recursos y preparación. Y con el chantaje final, como guinda del pastel. Este colegio debería empezar a admitir sus carencias, y aceptar que, si quiere ofrecer una enseñanza de calidad, hay que invertir más en lo que realmente importa, ser más honesto y humilde y demostrar que de verdad se preocupan y cuidan de sus alumnos, más allá de su parrafada publicitaria.