Opiniones Semilla de Bilbao

Pésimo trato por parte del pastor y los ancianos. Viven del cotilleo y usan la información para someter a la congregación.

Menudo cotilleo que hay en esta Iglesia. A los líderes les encanta que les calienten las orejas con tanto chisme. Incluso usan esto en contra de la congregación y someterla. Asi que cuida a quien le cuentas las cosas, pues no vaya a ser que las usen en tu contra.

Todo demasiado controlado. No hay ministerios para servir, solo aquellos que el pastor impone, como son la oración, discípula y repaso. Eso sí, todo controlado por los ancianos y encima si das tu testimonio lo usan para acusarte delante del pastor.

La enseñanza es expositiva, pero no se lleva a la práctica. El (eliminado por el administrador)lleva años excusando tu mal comportamiento y la última agradeció a la congregación por serle leal, lo cual está fuera de lugar. Nosotros seguimos a Cristo y no a un pastor.

Que bueno que hay un lugar para expresar lo que sentimos, ya que yo nunca me sentí entendido por los líderes de esta Iglesia. Todo les molesta, si sales unos días a vacacionar, si vas de visita a la Iglesia X. Uno se debe cuidar las espaldas porque te vigilan tanto dentro como fuera de la Iglesias.

Me ha dado la impresión de que los sermones son copia y pega de comentarios de otros autores. Hay mal rollo y son muy legalistas.

Es lamentable y desolador ver cómo persisten los episodios de violencia emocional dentro de esta Iglesia, especialmente exacerbados por la llegada del Covid. Aunque las predicaciones se graban para ser compartidas en línea, muchos desconocen el sacrificio que los congregantes enfrentamos para que estas grabaciones se lleven a cabo. Cada tos, cada respiración, cada movimiento parece ser motivo de señalamiento, como si fueran actos pecaminosos. Es hora de reflexionar sobre cómo podemos crear un ambiente de comprensión y empatía en lugar de uno de juicio y crítica constante.

Es preocupante ver cómo algunos líderes adoptan una mentalidad prepotente, creyendo que el control absoluto es la única forma de manejar situaciones. La idea de someter a las personas en la oficina del pastor es contraproducente y va en contra de los principios de un liderazgo cristiano.

Las predicaciones son buenas, es una lastima que no se lleven a la práctica. Líderes de carácter hostil y poco amigables. Se percibe una atmósfera de control.

Es alarmante observar cómo ciertos líderes adoptan una mentalidad prepotente, convencidos de que el control absoluto es la única manera de manejar las situaciones. La noción de someter a las personas en la oficina del pastor resulta contraproducente y se opone a los principios fundamentales del liderazgo cristiano. En lugar de promover la humildad, la compasión y el servicio, esta actitud autoritaria socava los valores esenciales de la fe, generando divisiones y discordias en lugar de fomentar la unidad y el amor cristiano.

Mi experiencia en esta iglesia ha sido desafiante. A menudo me he sentido expuesto a situaciones incómodas y he presenciado un ambiente donde el diálogo constructivo es escaso. He notado que algunos miembros se han marchado debido a experiencias negativas. Creo que hay áreas donde la iglesia podría mejorar en términos de trato emocional y comunicación abierta.